[ por: Andrés Daly ]
Clint Eastwood ha construído, como actor, un personaje tan reconocible en pantalla durante las últimas décadas, dirigiéndose a si mismo o siendo dirigido por otros, que este ícono viviente sólo tiene que mirar a la cámara fijamente por un par de segundos, gruñir ligeramente y ya está. El personaje es automáticamente creíble y el espectador no tiene dudas, como tampoco los otros personajes de la película, con quién se está tratando y que es capaz de hacer este viejo.
FATHER JANOVICH
Why? Do you have a problem with me, Mr. Kowalski?
WALT
You don’t want to know.
FATHER JANOVICH
No, I do.
WALT
The problem is I think you’re an overeducated, 27-year-old virgin who holds the hands of superstitious old women and promises them eternity.
Walt shuts the front door in Father Janovich’s face.
Entre el racismo (cómico y dramático) y la redención, este Gran Torino viaja haciendo diferentes paradas para tocar temas tan propios del cine de Eastwood como la vejez y la soledad, los inmigrantes y los blancos norteamericanos, la espiritualidad y lo terrenal, la vida y la muerte; sobre todo, la muerte.
En los diálogos al principio de la película, es notable como todos los personajes, negros, orientales, latinos y blancos, desean expulsar al resto de los vecinos y se sienten dueños del territorio urbano:
PHONG (SUBTITLED)
Why doesn’t that stupid, hairy white man move? He must be too dumb to realize he’s not welcome here. All the Mee-Khah left in the neighborhood should just move away. Look at him strut like a rooster.
WALT
I don’t know why these goddamned slopes had to move to my block. This used to be a nice neighborhood.»
LATINO DRIVER
That’s right, you keep walking. Fucking slopes everywhere you look, man. Why gooks come up in here and fuck up our neighborhood?
WALT
I got one. A Mexican, a Jew and a colored guy walk into a bar, the bartender looks up at them and says — ‘get the fuck out.
Gran Torino es una historia extremadamente simple muy bien contada, que se toma todo el tiempo del mundo para desarrollar el personaje de Eastwood, sus hijos y nietos (unos seres humanos despreciables, tanto o más que la familia de la boxeadora de «Million Dollar Baby», también de Eastwood) y totalmente reales (exceptuando al barbero de Walt, un cliché ambulante). La actuación de algunos de ellos, principalmente los vecinos Hmong del viejo Walt (Clint Eastwood), Thao y Sue, es tan natural que, sin exagerar, uno duda si en verdad estan actuando o si quiera poniéndole algún tipo de énfasis a sus diálogos, sobretodo «Sue». Sorprende el contraste de esta actuación tan naturalista con la mucho más clásica y establecida de Eastwood.
WALT
You have no honor. You’re the scum of the earth and when you’re gone, do you think anyone will care? No one will mourn. You won’t be missed.
La película se siente como una progresión lógica desde la violencia indiscriminada de Dirty Harry (Harry el Sucio), que no dudaría ni medio segundo, en cualquier de sus películas, en volarle la cabeza a un chino, a un negro o a un latino que esté asaltando un negocio de abarrotes y decir al mismo tiempo que apreta el gatillo una frase divertida y/o racista; una progresión desde estos personajes dueños de un único juego de reglas, como también lo son el viejo y enfermo Easwood de «Blood Work», el alcohólico y mujeriego de «True Crime» o los desencantados y antiheróicos justicieros, que viven en un mundo real, sucio, injusto y prejuicioso, en «Unforgiven», el último gran western o el sherrif de la cacería humana de «A perfect world». Todos estos personajes finalmente están conjugados en Walt, un veterano de la guerra de Korea, un tipo incapaz de fingir ante el resto una falsa cordialidad, de ser hipócrita como los inútiles de sus hijos, de decir exactamente lo que piensa en todo momento, aunque estos sean los comentarios mas racistas o hirientes posibles.
SUE
It’s a Vietnam thing. We fought on your side and when America quit, the Communists starting killing the Hmong, so we came over here.
El choque cultural entre los inmigrantes Hmong y este viejo norteamericano a la antigua que se niega a dejar los decaídos suburbios de algun pueblo de E.E.U.U., hoy transformados en guetto del Midwest, esta retratado con dedicación, simpleza, una narración clásica, comedia negra y pura honestidad. La mezcla de la comedia y el drama está muy bien equilibrada, dando espacio a que estos personajes se vayan desarrollando lentamente, si bien fácilmente previsibles dentro de la historia, constantemente plausibles ante el espectador.
Cuando llega el momento en que una puerta se abre y un vaso se rompe, el simbolismo se apodera de la película y Eastwood juega con las expectativas que el espectador tiene de él, de lo que significa ser héroe a la luz de sus personajes anteriores.
Con cuatro películas en cuatro años como director y aquí como actor además («La Conquista del Honor» y «Letras de Iwo Jima» el 2006! y «Changeling» y «Gran Torino», ambas también el 2008) este gigante del cine ya empezó a dirigir «The Human Factor»(2009). ¿Qué comes Clint?
WALT: The thing that haunts a guy is the stuff he wasn’t ordered to do.