The Discovery

La autodestrucción de una genial idea

The Discovery, me dejó esa sensación de viejas citas que deslumbran al comienzo pero luego en la cotidianeidad se desinflan, pierden magia, notas incongruencias y sin saber cómo la discusión que iba en A termina siendo M. Que no es lo mismo a la publicidad engañosa, porque aquí no hay engaño si no una ruta perdida, buenas intenciones, una fuerte idea inicial que se desmorona.

La historia ocurre un año después del anuncio de un gran descu­brimiento: La comprobación de vida después de la muerte, lo que impulsa a millones de personas a suicidarse en búsqueda o consuelo de una vida mejor.

Este descubrimiento científico del doctor Thomas Harbor (Robert Redford), impacta en los primeros segundos de la película, cuando un trabajador del canal de televisión que lo entrevista, se suicida al frente de él. Aquí uno siente ese placer de haberse topado con una idea simple y brillante, cuestionándote las reacciones humanas ante una real noticia así, y piensas ¿Cómo nunca se me ocurrió escribir un cuento sobre esto? ¿Cómo nunca nadie en la mesa-fiesta-asado puso este tema de conversación?

Su hijo Will (Jason Seguel), también vinculado a la medicina y completamente escéptico- a pesar de las evidencias- siente que debe hablar con su padre para detener esta ola de suicidios, aunque eso implique mentir. Y entre que toma la decisión y logra definidamente convencerse de los hechos, ocurren una serie de sucesos que te hace dudar si realmente el protagonista es la ciencia peleando con la moralidad. O un drama familiar donde el hijo se enamora. Y no es que una película no se pueda tener todo eso, puede ser la ciencia enfrentándose a decisiones morales mientras los dramas familiares explotan y el amor fulgurante nos conmueve. Pero debes encausarlo sin perder la ruta primaria, llevarnos por la idea principal de seducción a un desenlace en donde nuestra mente no ha hecho conjeturas.

Pero en vez de eso, nos muestra un predecible final, toma decisiones que ya hemos visto en otras películas, y aclaro que copiar-inspirarse o como lo llamen, no me parece malo. Pero aquí, vemos inconsistencias, que estoy segura con la ayuda externa en el guión se podría haber mejorado.

 

(Si no las has visto, no siguas leyendo abajo! has sido advertido… )

Si lo que vemos después del Ferry nada es real y la historia de amor nunca ocurrió, ¿Por qué aferrarme en mi siguiente vida, a recuerdos-sentimientos autogenerados?

Si en una vida llena de relaciones humanas y complejas en si misma. La mayor culpa de todo lo que fue tu existencia fue no ayudar a prevenir el suicidio de un desconocido en un contexto donde probablemente tus amigos y familiares también se están suicidando, es raro ¿no?

The Discovery es un bello y alucinante descubrimiento inicial que se suicida lentamente en una bañera oxidada.