Boyz n the Hood

En la fotografía de portada hay tres jóvenes y buenos amigos, vecinos, que viven a pocos pasos unos de otros en un barrio que está bajo la constante influencia de violentas pandillas de Los Angeles. Todos tienen a algún conocido o familiar que ha caído bajo las balas. Todos saben que esas balas las dispararon otras personas que no sólo viven también en el barrio, sino que muy probablemente, también tienen su mismo color de piel. A pesar de tener tanto en común en sus vidas, sus destinos serán muy diferentes.

Sobre el racismo, las armas y la violencia territorial, la marginalidad, la cultura y la imposibilidad de romper algunos patrones, trata el debut cinematográfico como guionista y director de un joven John Singleton. Con sólo 24 años, Singleton mantiene el récord hasta el día de hoy de ser el primer y el más joven director afroamericano nominado al Oscar por su trabajo. Es sorprendente pensar que Singleton es apenas un par de años mayor que sus protagonistas  y que logró, gracias a su excelente guión y su profunda convicción, convencer a un gran estudio de cine de financiar su primer proyecto, con una temática tan compleja. La película fue un éxito.

«Hell, no, I’m not gonna let somebody from Idaho or Encino direct a movie about living in south-central Los Angeles. They can’t come in here and cast it and go through the re-writes and know exactly what aesthetics are unique to this film.»- John Singleton

Escrita como parte de su proyecto de título en sus estudios de cine y basada en sus propias vivencias, Boyz n the Hood es de esas películas que, como las primeras obras de Spike Lee -especialmente la excelente Do the Right Thing (1989)- uno debe ver no sólo para disfrutar la postura honesta y confrontacional de sus directores en el cine, apasionados para exponer los espacios de su cultura invisibilizados en Estados Unidos -un poco menos el día de hoy, pero sigue ocurriendo- sino que también para comprender mejor los intensos conflictos raciales que han llevado a la población afroamericana, especialmente a la más joven, a tener un alto grado de mortalidad en las últimas décadas. La guerra de pandillas y sus efectos letales eran una realidad en 1991 y lo siguen siendo en 2024.

Ice Cube como «Doughboy», en su primera película.

Tre (Cuba Gooding Jr.), un niño de diez años bastante inteligente pero con mal carácter, se va a vivir obligatoriamente con su padre Furious Styles (Laurence Fishburne) cuando su madre Reva (Angela Bassett), preocupada por su proyección (aunque también, por otro lado, tirando la toalla) decide que debe ser el padre de Tre el encargado de guiarlo en el camino del hombre que éste debe ser. Furious es un personaje anómalo en el cine: un padre que criará sólo a su hijo, al que ama inmensamente; un papá muy cariñoso pero también riguroso, que le entrega amor, sabiduría, responsabilidades y que le abre los ojos al mundo. Furious termina criándolo por su cuenta mientras la madre de Tre decide enfocarse exclusivamente en su carrera profesional y en su vida, alejada de su ex pareja y su hijo. Pero como Reva muy bien le dice a Furious en un café: la crianza única de un padre no es razón ninguna para vanagloriarse; esto es únicamente lo que miles de madres ya han hecho durante miles de años.

FURIOUS STYLES

Any fool with a dick can make a baby, but only a real man can raise his children.

Conoceremos a Tre (Cuba Gooding Jr.), Doughboy (Ice Cube, en su primera película) y Ricky (Morris Chestnut) cuando tienen apenas nueve a doce años, para luego dar un salto temporal siete años después, al momento en que deben pensar, cuando ya termina su adolescencia, en que es lo que quieren hacer con el resto de sus vidas.

Padres, pandilleros, hombres de negocios, drogadictos, pobres o ricos, «perdedores» o «ganadores», felices o miserables, casados o solteros, vivos o muertos. Hay algunos caminos y no todos se ven muy claros en un lugar donde a la vuelta de la esquina hay una metralleta que te borra todos tus sueños. Tre, en una de las mejores escenas de la película, tiene un rápido aprendizaje sobre la predisposición al odio y el racismo que existe incluso entre hombres que tienen el mismo color de su piel y que tienen armas en el lado de la ley. Es un encuentro muy triste y violento con un policía de color.

TRE STYLES

I didn’t do nothing.

OFFICER COFFEY

You think you tough?

[pulls gun on Tre]

OFFICER COFFEY

Scared now, ain’t you? I like that. That’s why I took this job. I hate little motherfuckers like you. Little niggers, you ain’t shit! I could blow your head off with this Smith & Wesson and you couldn’t do shit. Think you tough? What set you from? Look like one of them Crenshaw mafia motherfuckers.

Ojo también con todas las escenas que Laurence Fishburne devora como este gran personaje. Sus vecinos se preguntan si éste no fue un predicador en otra vida. Porque sino, ¿cómo es capaz de hablar de esta forma a su comunidad?. Furious tiene las cosas bien claras.

FURIOUS STYLES

Why is it that there is a gun shop on almost every corner in this community?

THE OLD MAN

Why?

FURIOUS STYLES

I’ll tell you why. For the same reason that there is a liquor store on almost every corner in the black community. Why? They want us to kill ourselves.

Otra gran secuencia con este personaje lo tiene explicándole a su hijo y a su amigo Ricky, que es la gentrificación de su barrio:

FURIOUS STYLES

Would you two knuckleheads come on. I want you all to take a look at that sign up there. See what it says: cash for your home. Do you know what that is?

RICKY

A billboard.

TRE STYLES

A billboard.

FURIOUS STYLES

What are you all? Amos and Andy? Are you Stepin and he’s Fetchit? I’m talking about he message. What it stands for. It’s called gentrification. It’s what happens when the property value of a certain area is brought down. You listening? You bring the property value down. They can buy the land at a lower price, then they move all the people out, raise the property value and sell it at a profit. Now, what we need to do is keep everything in our neighborhood, everything – black. Black owned with black money. Just like the Jews, the Italians, the Mexicans and the Koreans do.

El pequeño Ricky y sus sueños de ser un jugador de fútbol americano.

Por estas y otras razones, tan relevante como lo fue hace treinta años, Boyz n The Hood está actualmente en Netflix.

Boyz n the Hood
3.5

Publicaciones relacionadas