Subjetividad como máximo realismo
[ por: Estefanía Conocchioli ]
El plano secuencia se encuentra al inicio de la película, donde muestra sin cortes un robo a mano armada, junto a una persecución que termina cuando uno de los ladrones cae desde la azotea del edificio; grandiosa ejecución de una experiencia subjetiva y grabada de la memoria, donde brinda la sensación de mayor realismo ya que el famoso llamado plano POV (point of view o punto de vista), junto al plano secuencia, logra abstraer de la realidad al espectador a su máximo, llevándolo a sentirse un consumidor de totales experiencias ajenas.
“…No se puede concebir ver y oír la realidad en su transcurrir más que desde un solo ángulo visual: y este ángulo visual siempre es el de un sujeto que ve y oye. Este sujeto es un sujeto de carne y hueso…”
Como muy bien lo dice Pier Paolo Pasolini (en «Discurso sobre el Plano Secuencia o el Cine como Semiología de la Realidad»), en la realidad y actualidad, toda vida de los seres humanos gira en torno a un solo ángulo visual propio de cada sujeto. He aquí el amor de gran parte de las civilizaciones hacia el cine, ya que este les brinda la posibilidad de tener el punto de vista de otras personas, objetos o lugares. Siendo todo esto su mayor atractivo, ya que solo al sentarse en una sala de cine puedes vivir experiencias distintas en un mismo lugar.
Pero, ¿Qué pasaría si se lleva al máximo realismo?, implicando totalmente al espectador y haciéndole sentir una experiencia única desde otra perspectiva, y siendo esta la de otra persona de carne y hueso.
El plano secuencia busca llevar como propuesta estética el caos, mostrando la secuencia totalmente de noche con colores oscuros y poco brillantes, cosa que se refleja en todo el film ya que está prácticamente se desarrolla sólo de noche.
Con sólo el comienzo de la película la idea base está hablada, permitiendo experimentar como propios los recuerdos y sensaciones grabadas de otras personas, siendo todo esto mostrado por medio del plano subjetivo junto a una sucesión, lográndose una explosión de sensaciones audiovisuales relacionadas con el caos de la ciudad, que se encuentra convulsionada por los conflictos raciales y expectante por la llegada del nuevo milenio y su tecnología.
Se ubica espacialmente al espectador dentro del local con la perspectiva cien por ciento de uno de los ladrones, entrando al lugar por medio de la cocina, teniendo este plano un trasfondo anárquico muy al estilo de cine negro, pero unido con la idea de película de ciencia ficción, donde los personajes cogen un sentido determinado en el contexto en el que están, en esta ocasión el mundo futurista no es una excusa, sino que es el engranaje que dota de sentido a los personajes de la película, donde luego con un paneo de persecución da una idea general de que uso y tipo de edificación se está recorriendo.
Los espacios determinan todas las acciones del ser humano y por ende sus recuerdos; viéndose en este edificio tan angosto la viva demostración de cómo la arquitectura condiciona gran parte de estas sensaciones por tratarse de espacios y circulaciones angostas, donde es difícil huir, enfatizándose la sensación de caos.
Ficha Técnica. Titulo: Días extraños. Título original: Strange Days. Género: Ciencia ficción. Director: Kathryn Bigelow. Actores (protagonistas): Ralph Fiennes, Angela Bassett, Juliette Lewis, Tom Sizemore, Richard Edson. País: Estados Unidos. Duración: 133min. Color. Año: 1995
Estefanía Conocchioli es alumna del curso optativo Cine+Arquitectura en la Facultad de Arquitectura de la Universidad Andrés Bello, en el primer semestre del año 2010. Actualmente cursa la carrera de Arquitectura. La publicación de su ensayo en este sitio -siendo esta una de cuatro tareas dentro del curso- forma parte de la difusión realizada a un conjunto destacado de ensayos realizados por los alumnos durante diferentes semestres.
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